En
nuestra vida terrenal, es difícil recordar que somos almas y no simples
cuerpos físicos.
Constantemente nos distraen las ilusiones y desilusiones
de este mundo. Nos enseñan que el dinero, el poder, y el prestigio y las
posesiones materiales son de suma importancia y a veces incluso el
motor de nuestras vidas.Nos enseñan que para ser felices tenemos que
lograr que los demás nos aprecien y nos respeten (...) En realidad somos seres inmortales que nunca se
separan energéticamente de los que aman. Tenemos almas gemelas y familias
espirituales que son eternas.Los espíritus guardianes nos guían y nos
aman siempre. Nunca estamos solos.Al morir no nos llevamos las ‘cosas’
que poseemos.
Nos llevamos nuestros actos y nuestras obras. Los frutos de
la sabiduría de nuestro corazón .Cuando despertamos a la idea de que
todos somos seres espirituales, cambian nuestros valores.Y por fin
podemos ser felices y estar en paz. Hay mucha belleza, mucha verdad y
amor a nuestro alrededor, pero muy pocas veces nos tomamos las cosas con
la suficiente calma para apreciarlos, como para darnos cuenta.A veces
hace falta que suframos una gran pérdida para recordar la belleza y el
amor que nos rodean, pero solemos olvidarnos pronto y caer en la
rutina. Tomemos las cosas con calma. Gocemos de los frutos de este
magnífico jardín .Este mundo se te entrega
BRIAN WEISS