9 de agosto de 2011

VIVIRBIEN

 
Crece en el mundo por todas partes la resistencia al sistema de dominación del capital globalizado por las grandes compañías multilaterales, sobre las naciones, las personas concretas y sobre la naturaleza. Está surgiendo, bien o mal, una tendencia orientada ecológicamente por prácticas y proyectos que ya ensayan lo nuevo. La base es siempre la economía solidaria, el respeto a los ciclos de la naturaleza, la sinergia con la Madre Tierra, la economía al servicio de la vida y no del lucro y una política sustentada en la hospitalidad, la tolerancia, la colaboración y la solidaridad entre los más distintos pueblos, suprimiendo de esta manera las bases para el fundamentalismo religioso y político, y para el terrorismo que hemos visto en Estados Unidos y, ahora, en Noruega. De los muchos proyectos existentes en América Latina, como la economía solidaria, la agricultura orgánica familiar, las energías alternativas limpias, la Vía Campesina, el Movimiento Zapatista y otros, queremos destacar dos por la relevancia universal que representan: el primero es el de «Vivir bien» y el segundo el de la «Democracia Comunitaria y de la Tierra», como expresión de un nuevo tipo de socialismo. El «Vivir bien» está presente a lo largo de todo el continente Abya Yala (nombre indígena para el Continente sudamericano), del extremo norte al extremo sur, bajo muchos nombres, siendo estos dos los más conocidos: suma qamaña (de la cultura aymara) y suma kawsay (de la cultura quechua). Ambos significan «el proceso de vida en plenitud». Ésta resulta de la vida personal y social en armonía y equilibrio material y espiritual. En primer lugar es un saber vivir y luego un saber convivir: con los otros, con la comunidad, con la Divinidad, con la Madre Tierra, con sus energías presentes en las montañas, en las aguas, en los bosques y selvas, en el suelo, en el sol, en la luna y en cada ser. Se busca una armonía, no de acumulación de riqueza, sino de producción de lo suficiente y digno para todos, respetando los ciclos de la Pachamama y las necesidades de las generaciones futuras (...) LEONARDO BOFF 
Contribución de América Latina a una geosociedad -